Extraña criatura en las costas Neozelandesas

Hoy se cumplen 100 entradas de este blog, puesto que es una cifra especial, tenía que celebrarlo con Nueva Zelanda, y ya que estamos en el mes del misterio os traigo criptozoología.

Este extraño objeto apareció en una playa de Auckland, Nueva Zelanda, y dejó conmocionados a los lugareños, quienes lo bautizaron lo hicieron como "monstruo de Muriwai"..

Sin embargo, la mayoría apuntan a que se trata de un trozo de madera cubierto de crustáceos filtradores, los cuales se adhieren a objetos flotantes. Estos artrópodos, más conocidos como "gansos cariblancos", son vistos frecuentemente en grandes cantidades, y no solo en maderas o rocas, sino también en estructuras navales como los cascos de los buques.

Probablemente los mitos sobre monstruos marinos han existido desde el momento en que los primeros humanos se fijaron en el océano. Para algunos no hay duda de que su imaginación comenzó a fabricar todo tipo de criaturas marinas increíbles, pero para otros todas estas misteriosas criaturas eran reales.

Pero incluso así, continuaban teniendo más miedo a lo que no podían ver, a lo que se encontraba oculto debajo de las olas. De hecho, estaban tan preocupados por las bestias del abismo que en algunos mapas de la época habían marcados los lugares donde se decía que habitaban estas criaturas. Hoy en día el océano sigue siendo un misterio para la mayoría de nosotros, oscuro y terrorífico.

Todo esto demuestra nuestro desconociendo sobre la gran extensión de agua en el planeta Tierra. Queremos colonizar otros planetas, queremos descubrir si existe vida extraterrestre en otros mundos, pero parece que no queramos conocer todos los secretos que nos ocultan los océanos. Pero por suerte, en ocasiones misteriosas criaturas aparecen en las playas. Como en Nueva Zelanda, donde varias personas vieron una extraña criatura gigante cubierta de percebes en una playa.

Una ballena muerta, un monstruo marino o una criatura extraterrestre son sólo algunas de las hipótesis para explicar el extraño objeto cubierto de percebes en una playa de Nueva Zelanda. Melissa Doubleday estaba paseando por la playa de Muriwai, cerca de Auckland, cuando se encontró con un extraño objeto varado en la orilla. Fue entonces cuando la joven australiana decidió fotografiarlo para publicarlo en su perfil de Facebook por si alguien pudiese identificarlo.

"En un principio pensé que se trataba de una ballena varada, pero cuando me acerqué vi que era algo tan extraño", relató la joven a la prensa local. Su 'post' en la red social se ha llenado de un sinfín de sugerencias que van desde una "canoa maorí", un "monstruo marino con rastas", un "árbol de Navidad de playa", hasta una "cápsula alienígena del tiempo".

Pero la verdadera sorpresa de Melissa fue que su foto se viralizó después publicarla en Facebook, compartida en las redes sociales y en los principales medios de comunicación. Al parecer el extraño objeto extraño era una reminiscencia del terremoto de magnitud 7,8 que levantó el fondo del mar unos dos metros en las playas de Nueva Zelanda. Rocas cubiertas de percebes, lapas y algas subieron del fondo marino hasta la superficie. Como resultado de la súbita elevación, la vida marina incluyendo langostas y todo tipo moluscos marinos aparecieron masivamente varados en las playas.

La misteriosa criatura u objeto ha desatado un intenso debate en las redes sociales, donde internautas han especulado que podría ser cualquier cosa, como una ballena muerta, un naufragio, obras de arte, una foca monje del Caribe, un monstruo marino o una cápsula del tiempo de origen extraterrestre. Aunque para los escépticos lo más probable es que fuera un gran trozo de madera cubierto en lo que parecía ser percebes.

Pero criptozoologos locales aseguran que esta no es la primera vez que aparece una extraña criatura en esa misma playa. En 1968, apareció un globster, una masa orgánica no identificada, varado en una playa de Muriwai. La misteriosa criatura era de más de 9 metros de largo y de 2 metros de altura. El mismísimo director del Departamento de Zoología de la Universidad de Auckland, dijo que nunca había visto nada parecido y que no podía identificarlo.

Dado que parece no haber un interés especial en identificar este tipo de masas orgánicas, siempre se consideran que son los restos en descomposición de ballenas. Por lo que esta nueva criatura u objeto continuará siendo un misterio.